Sara Molina

Siempre le dijeron que vivía en la luna de Valencia, así que allí se fue a estudiar el Grado en Ingeniería Multimedia, en el que pudo aprender informática, montaje, animación… Durante su estancia en la capital valenciana comió mucho arroz y comprendió que lo que más le gustaba en este mundo era escribir.

Por eso se trasladó a Madrid para estudiar guion. En la gran ciudad, se sintió como Lizzie McGuire llegando a Roma para vivir el sueño de su vida. Después realizó unas prácticas de guion en la productora Mediacrest y se especializó en transmedia con otro máster de la UJI.

Le encantaría vivir en un musical y por eso también escribe teatro. Dos de sus obras han sido representadas en salas.

Como es más canaria que las papas arrugadas, participa en proyectos relacionados con sus queridas islas. Recientemente ha sido seleccionada en el laboratorio Islabentura Canarias.